Es conmovedor lo ocurrido el pasado 7 y el martes 19 de Septiembre del año en curso. Encender la T.V o visitar las redes sociales, puede verse emblemas y frases, apoyando a México. Diferentes actores del espectáculo, artistas y deportistas, donando cantidades de cifras para la reconstrucción de los Estados afectados por los sismos. El corazón de los mexicanos, es, sin duda, indescriptible con una sola palabra. Desde lo ocurrido de los terremotos, no han parado de trabajar cientos de personas civiles, sin importar las condiciones climatológicas. Gente de muy buena voluntad, que dedican su fuerza removiendo escombros, esperando encontrar algún sobreviviente.
Suman ya 16 días del primer sismo y 4 días del segundo. Medios de comunicaciones, en sus transmisiones, hablaron sobre los actores políticos, al igual que en las diferentes redes sociales, se pudieron leer comentarios, donde exhortaban al INE que convocarán a los mandatarios de cada partido a donar el 20 % de lo que se les fue otorgada para sus campañas electorales. Hubo respuesta en parte pero como es de esperarse, lo más seguro es que estén montando un espectáculo para ser entregado dicha donación que la ciudadanía demandaba.
Es muy lamentable mirar el dolor de la gente que perdió todo en el sismo, pero es todavía más doloroso, ver que los actores políticos, dudan de la donación. El mandatario del País EPN, el cual, no se le despeja ni por un segundo las cámaras de los medios, se le ha visto en varias ocasiones caminando y visitando a los damnificados por el sismo. Haciendo las labores de un presidente preocupado por el pueblo, su interés de ver devastado su país, quizá lo esté haciendo más solidario, y ojala le ayude a dejar de ser un títere, para terminar su buena labor como presidente de la patria.
México está de luto, pero también dolido por la herida que le han dejado los políticos que han conducido al país hacia un barranco, lleno de corrupción, inseguridad, desigualdad entre la clase política y el proletariado, donde cada día en vez de avanzar, vamos en retroceso. Claro está, y lo han demostrado los miles de civiles mexicanos, que cuando marchan juntos, sin duda, son capaces de romper barreras sin importar la dificultad. Porque si algo caracteriza a México, es su coraje y su valentía. Una sociedad unida, es temible, más que el poder de un partido político.