Por C.F.de J

¿Debemos agradecer por los programas que implementa el gobierno?; como el de becas, el de apoyo para adultos mayores, el de sembrando vida, construyendo el futuro, claro que no, lo que deberíamos hacer es exigir que se manejen con total transparencia, pues los recursos de estos programas salen de  los bolsillos de todos los mexicanos, y así es todos los ciudadanos hasta los más  humildes pagamos impuestos por lo que consumimos y de esta manera contribuimos no solo para los programas, sino además le pagamos a todos los disque ¨ servidores públicos ¨

muchos de ellos en realidad verdaderos ¨vividores públicos¨ , a los que además pretenden se les rinda pleitesía, nosotros, usted y yo y todos a los  que nos corresponde trabajar para producir la riqueza del país, somos quienes les pagamos, y muy bien por lo tanto deberían servirnos también muy bien, pero no es así.

Muchos de ellos no se conforman, y se roban nuestros impuestos, para comprarse mansiones y en todas partes y de todos los tamaños, pero dios es grande, muchos de ellos pretenden ocupar otros puestos, y como dicen, si quieres saber quién es tu padre, participa en política, si no lo creen pregúntele a la candidata al gobierno de Veracruz a la cual han exhibido, debe estar muy  arrepentida, pero así somos los seres humanos soberbios, pensamos que somos los más inteligentes y los más buenos, pero no.

Así se gastan nuestros impuestos, ahora pensemos, usted le aplaude al cajero automático cuando le da su dinero o ha visto a alguien hacerlo, no verdad, lo que si he tenido la oportunidad de ver,  es  como una persona enojada le daba un manotazo y le mentaba  la madre  al cajero enojado porque no le dio su dinero y desde luego que tenía razón, porque es su dinero, no es la forma claro, porque además el cajero no tiene progenitora, eso es lo que nos ocurre a los ciudadanos cuando nuestras autoridades gasten nuestros impuestos en obras faraónicas, donde invierten los impuestos destinados a cuestiones prioritarias como la salud o la creación de empleos permanentes  para de esta manera combatir la pobreza, pero no es así, entonces al igual que el señor del cajero deberíamos dar un manotazo, no literal, pero debemos exigir que se nos escuche, no recordarles a su progenitora pues la mayoría no tiene o hace como que no tiene.

Por eso no le aplaudan a los cajeros automáticos, ni le des tu voto a aquellos que no hacen un buen uso de nuestros impuestos.